En 1977, antes de las primeras elecciones de la Democracia, Manuel Fraga forzó el secuestro de una edición del periódico Diario 16, dirigido por Miguel Ángel Aguilar. El motivo era un artículo publicado bajo el epígrafe Y Fraga cogió su fusil, que parafraseaba el título de una película de Dalton Trumbo (Johnny Got His Gun, Johnny cogió su fusil, 1971). El motivo de escoger esta cita eran unas declaraciones del ex-ministro franquista y fundador del Partido Popular, en el año 1967: “Porque Cataluña fue ocupada por Felipe IV, que la venció, fue bombardeada por el general Espartero, que era un general revolucionario, y la ocupamos en 1939 y estamos dispuestos a ocuparla tantas veces como sea necesario y para ello estoy dispuesto a coger el fusil de nuevo”.
Fraga había sido Vicepresidente segundo del Gobierno y Ministro de Interior (llamado entonces Ministro de la Gobernación) entre 1975 y 1976 con Carlos Arias Navarro de Presidente del mismo, quien también se incorporaría a la aventura democrática de Alianza Popular en las elecciones de 1977. Sin duda, Fraga aspiraba al cargo que obtuvo Adolfo Suárez en 1976 por encargo del rey Juan Carlos I, el de Presidente del Gobierno. El fundador del PP parece que le había expresado su malestar en estos términos al falangista José María de Areilza, conde de Motrico: «Nos ha dado por el culo este cabrón», según lo afirmado en Diario 16.
No me cabe la menor duda que a Cospedal le gustaría secuestrar los telediarios y desayunos de Radio Televisión Española, si el sistema se lo permitiese. Pero sobre todo le gustaría coger el fusil el día 20 de noviembre. De momento, ya ha probado la pistola automática en el campo de tiro de Castilla-La Mancha y le ha gustado. Pero ella aspira a la caza mayor. Cospedal ha afirmado hoy lo que ya anticipábamos aquí ayer: van a intentar seguir el camino del ex-ejecutivo de VW Peter Hartz y esa línea de actuación implica reducir, reformular o reformar -depende del vocabulario que se prefiera- las prestaciones de desempleo. Las probabilidades de que esas sean parte de las medidas del PP son del 95%. Además, se apoyarán en que funcionaron en Alemania.
Pero es muy importante comprender el marco conceptual económico y responder la siguiente pregunta: ¿Por qué se puede afirmar que la reducción de la cobertura por desempleo rebaja la tasa del mismo? Esta conclusión se apoya en el modelo macroeconómico del capitalismo vigente, que expresa el equilibrio en el mercado de trabajo como el punto de intersección de dos curvas: la curva de la ecuación de salarios y la curva de la ecuación de precios. La primera relaciona el llamado salario real W/P (W=salario nominal, P=nivel efectivo de precios) con la tasa de desempleo u y la llamada variable residual z:
W/P=F(u,z)
donde F es el nombre de una cierta función de las variables u y z. La variable residual z incorpora:
- el seguro de desempleo
- los cambios estructurales por los que pueda estar pasando una economía o que se estén llevando a cabo por vía política
- el valor del salario mínimo
- el nivel de negociación colectiva de los salarios
- el nivel de protección del trabajador y la dificultad del despido
Es importante ver en qué términos están expresados estos factores, y que no se dice «flexibilidad» sino «nivel de protección». ¿Por qué? Porque z está formulada de manera que F sea una función creciente con z. Por tanto, está ecuación afirma que el nivel del salario real es
- mayor cuanto mejor es el seguro de desempleo, porque este obliga al empleador a ofrecer un mejor salario,
- mayor si hay más cambios estructurales en la economía; los cambios estructurales implican un reajuste en los procesos empresariales y una mayor demanda de trabajadores; sin embargo, esta mayor necesidad por parte de las empresas les obligan a ofrecer mejores salarios, para un valor fijo pero arbitrario de u,
- mayor cuanto mayor es el salario mínimo; hay que ofrecer mejores condiciones si se puede vivir con el subsidio de desempleo,
- mayor es cuanto más poder de negociación tienen los sindicatos,
- mayor es cuanto más protegido está el trabajador, ya que una bajada de precios -por un reajuste, que puede ser drástico después de la explosión de una burbuja, por ejemplo- aumenta el salario real, y esto supone una sobrecarga para las empresas que no pueden soltar lastre despidiendo a parte de sus trabajadores.
Con respecto a la variable u, la teoría macroeconómica aceptada nos dice que F decrece con ella: cuanto más desempleo, peores son los salarios que los trabajadores en búsqueda de empleo están dispuestos a aceptar.
La otra curva es la ecuación de precios, que viene dada por
P=(1+m)W
donde m es el llamado margen de precios sobre el coste. Si m=0, entonces todo el precio se dedica a pagar salarios, sin producir beneficio empresarial por renta de capital. Reorganizado matemáticamente esta última ecuación, podemos poner
W/P=1/(1+m)
Pues bien, la intersección de ambas curvas nos da la llamada tasa natural de desempleo, que aquí preferiremos denominar como tasa estructural de desempleo
Si aumentamos la z a otro valor superior z’, aumentamos el desempleo, para un nivel dado de salarios W/P. Por contra, si vamos de z’ a z, de nuevo para un nivel fijo de salarios W/P, conseguimos hacer decrecer la tasa estructural de desempleo
Otra manera de reducir la tasa de desempleo es hacer decrecer la m, es decir, la renta del capital, aún manteniendo el nivel de los salarios, es decir, de la renta de trabajo
No obstante, hay varias puntualizaciones sobre estos dos movimientos clásicos en las curvas:
- Estamos estudiando los puntos de equilibrio. Sin embargo, la llamada dinámica, es decir, cómo evoluciona realmente el sistema y cuánto tarda en llegar de un punto a otro, no queda incluida en este modelo.
- Los razonamientos se han hecho para un nivel fijo de salarios. Obviamente, podemos cambiar la función F y el lugar que ocupa en el plano W/P vs u a través de la política, promoviendo un modelo productivo diferente.
Estos matices complican el espíritu simplificatorio del neoliberalismo, que es el fusil que ha encargado Cospedal, y que tiene varias municiones:
- bajada del seguro de desempleo en cuantía y duración,
- paralización de los cambios estructurales en la economía: se intentará volver al negocio de la construcción liberando más terreno para forzar una bajada de los precios acompañada de mayor actividad en el sector, se potenciará la pequeña empresa sin vocación de I+D+i,
- bajada del salario mínimo,
- disminución del poder de negociación colectiva, eliminación de liberados sindicales en público Auto de Fe, bajo la acusación de falta de dedicación al aumento de la m,
- flexibilización del despido.
No se está teniendo en cuenta que hay un problema de crecimiento y este no se va a solucionar así. Se va a impulsar un crecimiento a corto plazo, una nueva burbuja. Esto se explica en las curvas haciendo la diferencia, que no hemos hecho, del precio efectivo (sujeto al medio plazo) y el esperado. Pero, de momento, eso lo dejamos para otro día.
Procédase como corresponde y haga la Justicia que acostumbra el Santo Oficio
«sucesos de vitoria», «carnicerito de málaga»